La colmena y sus mentiras plenas

“Más de 82,4 millones de personas en todo el mundo se han visto obligadas a huir de sus hogares. Entre ellas hay 26,4 millones de personas refugiadas, más de la mitad menores de 18 años.También hay millones de personas apátridas a quienes se les ha negado una nacionalidad y acceso a derechos básicos como educación, salud, empleo y libertad de movimiento.”     

-ONU

 

  Había una vez una abeja llamada Axis*, ella vivía en una colmena llamada Arepa gobernada por la Reina Verde. A esta abeja no le faltaban recursos, y tenía un almacén donde guardaba comida y otros elementos que le sobraban. Ella tenía un hijo, pero lamentablemente su padre falleció cuando este tenía un año. Vivían en dos hexágonos los cuales consiguió Axis trabajando duro, y tenían muchos amigos; hasta que un día, algo sucedió.

Pasaban los días y Axis se empezó a dar cuenta de que sus amigos más cercanos se estaban yendo de la colmena sin previo aviso, lo cual la sorprendió. Días más tarde, salió a dar una vuelta por la colmena, y vio que el hexágono de su mejor amiga estaba vacío y que por la puerta entraban abejas desconocidas. Luego de ver este episodio, se dio cuenta de que eran cómplices de Verde, lo cual le preocupó y empezó a empacar para escapar de allí antes de que fuera su turno. Axis, preocupada y apresurada, terminó las valijas para su hijo. Le dijo que se fuera a Eupora* donde lo iba a estar esperando su tío Jacinto: “yo iré más tarde”, dijo Axis. El niño se marchó volando a Eupora en busca de asilo por la persecución que habían sufrido en su colmena. Al pasar de los días, Axis estaba muy cansada y agotada de empacar, hasta que un día, justo antes de partir, tocaron la puerta. Lentamente y nerviosa fue a abrir la puerta, al abrirla entró un zángano de aspecto importante con dos obreros armados a su espalda. El obrero sacó un papel y se lo dio al zángano y este empezó a leer “Por orden de la Reina Verde toda persona que no sea obrera y/o no aporte nada a la colmena perderá todas sus propiedades y será expulsada de la sociedad”. La abeja, triste y desilusionada por las medidas tomadas por la reina, fue en busca de su hijo a Eupora, buscando con ello nuevas oportunidades. 

Axis hizo un largo viaje hacia Eupora. Al llegar se encontró con su hijo y este ya tenía la nacionalidad, y le habían aceptado el asilo político. Ella fue a donde se encontraba la reina y le preguntó si le podía dar la nacionalidad y asilo político al igual que su hijo. La reina le dijo que lo iba a pensar, pero luego de unos días le notificaron que su propuesta había sido rechazada y que debía irse de la colmena. Así es como, triste y marginada por la situación se quedó ilegalmente en Eupora. 

 

* La ortografía de Eupora y Arepa fueron alteradas por el autor de este relato.

 

Referencias:

Organización de las Naciones Unidas. Declaración universal de los derechos humanos, 1948, un.org.

Agencia de la ONU para los refugiados, “82,4 millones de personas estaban desplazadas por la fuerza”, Tendencias globales 

 Tendencias Globales de ACNUR, 2020, https://www.acnur.org/es/datos-basicos.html.